Un estudio reciente realizado por la Oficina Europea de Estadística, Eurostat, ha revelado que España lidera a nivel europeo el uso del teléfono móvil. Efectivamente, el 93% de los usuarios de Internet españoles navegan a través de su smartphone. A los datos recogidos en nuestro país, le siguen Chipre con un 88%, Países Bajos (88%), Croacia (87%), Reino Unido (86%) y Dinamarca (85%).
A excepción de Eslovaquia, Estonia, Lituania, Polonia y República Checa, los smartphones han sido los dispositivos más utilizados por todos los ciudadanos de la Unión Europea para realizar búsquedas en Internet. A pesar del aumento en el uso de los teléfonos móviles, los ordenadores portátiles mantienen un peso relevante en la sociedad europea así como en nuestro país dónde el 58% de los usuarios navegan desde estos dispositivos. A su vez, los ordenadores de mesa y las tablets con un 45% y un 42% respectivamente siguen de cerca al ordenador portátil.
Además del uso del móvil, el informe de Eurostat se ha centrado en estudiar los aspectos relativos a las informaciones personales y a nuestro modo de compartirla. En España, el 76% de los usuarios de internet compartió información personal, el 60% dio a conocer su ubicación y, únicamente, el 50% limitó su privacidad en las redes sociales.
El hecho de sentir la necesidad de estar conectado y compartir nuestras vivencias a través de las redes sociales, hacen que estemos pendientes del móvil una gran parte de nuestro tiempo, llegando, incluso, a desatender a las personas que tenemos a nuestro alrededor. Este nuevo fenómeno es conocido como phubbing.
Desde el nacimiento del smartphone en 2007, este término formado por las palabras inglesas phone y snubbing se ha instalado en nuestras vidas con total normalidad. Se define como el acto de menospreciar a las personas que nos acompañan por prestar más atención al móvil o a otros aparatos electrónicos que al propio individuo.
Este fenómeno se ha convertido en algo muy común en nuestro día a día: durante una cena con tu pareja, un café con amigos o un viaje en familia. Tanto es así que ha llegado a ser candidata a palabra del año 2016. Y tú, ¿has vivido de cerca el phubbing?